El betacaroteno está considerado una pro-vitamina A, lo que significa que cuando ingieres sus fuentes naturales, tu hígado lo procesa, para convertirlo en esta vitamina. ¿Sabes un dato curioso al respecto? Pues que solo se va a producir la mencionada transformación cuando tu cuerpo precise su aporte. Así, logra evitar el exceso de vitamina A.
Conocido por ser un gran aliado de la salud ocular, la buena noticia es que las propiedades del ß–caroteno son muchas más de los que creías. ¿Las repasamos juntos?
Índice
1. Betacaroteno como antioxidante
Sus propiedades intrínsecas como sustancia antioxidante, constituyen un obstáculo a la hora de producir el fenómeno de la cascada de radicales libres u oxígeno hiperreactivo altamente susceptible de causar daños a la estructura de las membranas celulares y al material genético que se contiene en el núcleo de las células, representando una puerta abierta a multitud de enfermedades cardiovasculares y tumores cancerígenos.
2. Para la salud ocular
Esta propiedad deriva de la anterior en tanto que, dado que los ojos son la parte del cuerpo que más sufre la acción dañina de los radicales libres, puedes compensar su efecto gracias a los alimentos ricos en betacarotenos y a los suplementos, pues la ingesta de ambos actúa como escudo protector.
Son numerosos los estudios que revelan el vínculo entre el consumo de ciertos nutrientes y la disminución del riesgo de sufrir enfermedades de la vista relacionadas con el paso del tiempo, como las cataratas y la degeneración macular que se asocia a la edad (DMAE), y que no tiene cura.
Los ß–carotenos son algunos de esos nutrientes, destacando las zanahorias para mejorar la visión y las espinacas para cuidar la retina.
3. Para inhibir los ácidos grasos
Existen ciertos estudios realizados en vitro que revelan que, bajo ciertas condiciones de laboratorio, se habría demostrado un poder de inhibición de la beta-oxidación de los ácidos grasos por parte de los carotenoides, en general y del betacaroteno, en particular.
Tales estudios entrarían en conexión con otros destinados a establecer o descartar una relación causa-efecto entre presencia y freno a la formación de placas de ateroma, propias de la enfermedad coronaria.
Pues bien, se han obtenido indicios de la existencia de tal relación, aun partiendo de que en el organismo humano, tal correspondencia pudiera verse influida por diversos factores que le otorgaran mayor complejidad.
4. Para prevenir el riesgo de enfermedades
También existen ensayos clínicos realizados en pacientes con SIDA que resultan sumamente reveladores en lo relativo a que una suplementación con beta-caroteno podría servir de estímulo a la formación de glóbulos blancos (sobre todo linfocitos) y a la actividad de las células NK (las famosas “natural killers” o asesinas naturales), que se encuentran entre las actoras primordiales de los mecanismos de lucha contra agentes agresores.
Lo afirmado requiere una matización: no se conoce a ciencia cierta si tal función deriva de la actividad del ß–caroteno como vitamina A, una vez se ha transformado, o de otras características inherentes a su familia, aunque la afirmación sería igualmente válida.
5. Para reforzar el sistema inmune
El betacaroteno ocupa también un importante papel dentro del ámbito del sistema inmunitario, sobresaliendo su capacidad para contribuir a la activación de una glándula de nombre “timo”, uno de los principales núcleos de la maquinaria inmunitaria durante los primeros años de vida.
Lo cierto es que existen patologías bastante conocidas en la que este carotenoide despliega sus efectos, pero resulta interesante que conozcas otras funciones menos evidentes que desempeña el ß–caroteno.
¡Toma nota de sus otras propiedades positivas sobre el sistema inmunitario!
- Es un paliativo para la protoporfiria eritropoyética (patología apreciada por la sensibilidad a los rayos solares)
- Disminuye la sensibilidad a la intolerancia a la glucosa
- Amortigua el proceso de degeneración macular asociada con la edad, como ya hemos comentado
- Puede controlar la aparición de la leucoplasia oral (enfermedad manifestada por manchas blancas en boca y lengua, que suele derivar de hábitos de alcohol y tabaco), mediante un consumo sostenido
- Contribuye a controlar igualmente la esclerodermia (enfermedad del tejido conectivo apreciada a nivel externo por un engrosamiento y endurecimiento de la piel), pudiendo ser la falta de betacaroteno, una de sus causas
- Disminuye el riesgo de padecer artritis reumatoide, una de las enfermedades autoinmunes más temidas, causada por una reacción anómala del organismo contra sus propios elementos. Para lograrlo, debes evitar la insuficiencia en la alimentación de betacaroteno y vitamina C
6. ß–caroteno para la piel
Pese a todo lo dicho, lo cierto es que el valor más reconocido del betacaroteno sigue siendo el de los beneficios que ejerce sobre la piel. De hecho, son muchos los estudios que han demostrado que la ingesta de betacarotenos de forma natural evita futuros problemas en la piel y permite plantar cara a enfermedades y problemas relacionados con este importante órgano.
¡Ahí van algunas de las bondades que ejerce sobre la piel!
- Ayuda a reducir las quemaduras del sol en personas con piel sensible (aunque bajo ninguna circunstancia sustituye a los protectores solares)
- Contribuye a reducir los signos del envejecimiento prematuro en la piel
- Favorece el tratamiento de la piel seca, eczemas y psoriasis
- Participa en la reparación de los tejidos de la piel dañada por heridas y cortes, así como en el tratamiento de las manchas de la piel
- Promueve la apariencia saludable de la piel
¿Aumenta este carotenoide el bronceado de la piel?
Ríos de tinta han corrido, de un tiempo a esta parte, en relación a si la ingesta de betacaroteno durante los períodos de exposición al sol propician un bonito bronceado que aumente la tonalidad de la piel.
Por tanto, puedes confiar al betacaroteno tu bronceado, pero no la protección de tu piel mientras lo estás recibiendo. De ahí que los expertos insistan en que, con independencia de que tomes alimentos ricos en este carotenoide y/o suplementos con base en él, sigas las recomendaciones básicas para evitar las nocivas consecuencias de un efecto excesivo del sol sobre tu piel.
Estas recomendaciones se resumen en: usar cremas solares, evitar el sol a las horas centrales del día y huir de una exposición directa, que puede desembocar en enfermedades de distinta consideración.
Vistas todas sus propiedades, podemos afirmar que el betacaroteno es la más fiable de todas las fuentes de vitamina A, circunstancia que le otorga un papel crucial en el desarrollo corporal, los órganos de la visión y la integridad del sistema inmunitario. Todo un derroche de cualidades a las que puedes tener acceso vía alimenticia y de suplementación. ¡No pierdas la oportunidad!
Antioxidante - 100%
Prevenir las enfermedades - 100%
Refuerzo sistema inmune - 99%
Para la piel - 100%
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