Consideraciones nutricionales en Mujeres Corredoras de Resistencia
Índice
- 1 Importancia de la Nutrición en Deportes de Resistencia
- 2 Pautas Generales de Macronutrientes en Atletas Adultos
- 3 Bajo consumo de energía en atletas femeninas
- 4 Efectos negativos de consumir pocas calorías
- 5 ¿Cuántas calorías mínimas debe consumir una mujer corredora?
- 6 Tríada de la Mujer Deportista
- 7 Consecuencias del déficit energético
- 8 Amenorrea y Mujeres Corredoras de Resistencia
- 9 Relación entre la amenorrea y la baja densidad ósea
- 10 Tratamiento de la Tríada
- 11 Conclusiones
- 12 Fuentes Bibliográficas
Importancia de la Nutrición en Deportes de Resistencia
La nutrición en los deportes de resistencia es de suma importancia y el tema ya se ha tratado bien en muchos estudios.
Este post se centra en las recomendaciones específicas que podrían hacerse para las corredoras de resistencia femeninas, una población en crecimiento que puede alcanzar hasta el 60% de los participantes de una carrera.
De hecho, cada vez más mujeres participan en competiciones de carrera y se puede suponer que esta tendencia crecerá en los próximos años
Por lo tanto, es importante realizar recomendaciones nutricionales adecuadas que tengan en cuenta los requisitos fisiológicos específicos de las corredoras
Pautas Generales de Macronutrientes en Atletas Adultos
*BW= body weight (peso corporal); EI= energy intake (calorías consumidas)
Bajo consumo de energía en atletas femeninas
Correr es una actividad física que consume mucha energía. Aun así, hay muchas corredoras de resistencia que tienden a mantener un consumo de energía total muy bajo para reducir la grasa corporal y el peso.
Dado que correr es una disciplina en la que hay que cargar con el peso del cuerpo, se cree que cuanto más ligero se lleve el cuerpo, mejor es el rendimiento
Pero esto puede llevar a situaciones negativas y deficiencias nutricionales
Efectos negativos de consumir pocas calorías
Las ingestas restringidas de energía, proteínas, carbohidratos y micronutrientes son otras consecuencias de las estrategias nutricionales destinadas a disminuir el peso y la grasa corporal, que finalmente pueden tener efectos significativos en la salud y el rendimiento físico.
Tratar de eliminar la grasa corporal más allá de la disposición biológica puede tener efectos negativos directos
¿Cuántas calorías mínimas debe consumir una mujer corredora?
Desde una perspectiva práctica, el requisito de energía exacto de un deportista no es fácil de cuantificar.
Sin embargo, existe un consenso general sobre la disponibilidad de energía mínima necesaria para una deportista femenina
Esta es la energía requerida para vivir de una manera saludable sin tener en cuenta la energía gastada durante la actividad física. La energía disponible es, por lo tanto, la ingesta total de energía aportada por la nutrición menos la energía gastada durante las actividades físicas.
Ejemplo calorías mínimas para mujer de 50kg
Concretamente, para una deportista de 50kg con un porcentaje de grasa del 15% y una masa libre de grasa de 42’5 kg, la energía disponible debe ser superior a 1900 kcal/día.
Tener un gasto de energía de 500 a 600 kcal durante las actividades deportivas aumentaría la ingesta diaria total de energía a 2400-2500 kcal.
Tríada de la Mujer Deportista
La expresión “tríada de la mujer deportista” abarca tres componentes:
- Disponibilidad de energía baja o desorden alimenticio
- Disfunción o problemas menstruales (amenorrea), y
- Mala salud ósea o baja densidad mineral ósea.
Los estudios han mostrado que la prevalencia de mujeres deportistas que presentan simultáneamente los tres componentes de la tríada de la mujer deportista es bastante baja, entre 0 y 16%
Consecuencias del déficit energético
El déficit energético crónico afecta negativamente la función menstrual y la salud ósea. La función muscular puede verse afectada negativamente también, debido a que se ha demostrado que el déficit de energía a corto plazo de solo 5 días reduce la síntesis de proteínas.
Amenorrea y Mujeres Corredoras de Resistencia
La amenorrea es la ausencia de ciclos menstruales durante más de 3 meses. La oligomenorrea se caracteriza por ciclos menstruales que ocurren a intervalos de más de 35 días.
La prevalencia de amenorrea que, varía ampliamente con el deporte, el peso y el volumen de entrenamiento, supone el 65% en algunos estudios de corredoras que realizan modalidades de larga distancia, en comparación con el 2% a 5% en la población general.
Relación entre la amenorrea y la baja densidad ósea
El ejercicio tiene efectos beneficiosos sobre la acumulación de minerales en los huesos durante la infancia y la adolescencia.
Se estima de 10% a 40% más de ganancia de masa ósea observada en adolescentes físicamente activos en comparación con individuos sedentarios.
Sin embargo, con una disfunción menstrual se producen efectos adversos en los huesos, con valores más bajos de densidad mineral ósea en deportistas con amenorrea en comparación con las que tienen una menstruación normal.
El desorden alimenticio o baja disponibilidad de energía también se asocia con baja densidad mineral ósea independientemente de la irregularidad menstrual en corredoras.
Riesgo de fracturas
La lesión por estrés óseo resulta de un estrés mecánico crónico repetitivo. Las lesiones por estrés óseo representan una carga significativa para las corredoras femeninas, con una incidencia de hasta 21% en deportistas que participan en carreras, y un mayor riesgo en comparación con los corredores masculinos.
Tratamiento de la Tríada
El tratamiento para la tríada de la mujer deportista debe implicar un aumento del consumo de energía y/o una reducción de la gasto energético de ejercicio, según las exigencias del deporte, así como la normalización del peso corporal.
Estas son las mejores prácticas actuales para la reanudación exitosa de la menstruación y la mejora de la salud ósea.
Cambios graduales
Los cambios deben ser graduales, con el objetivo de aumentar el peso en aproximadamente 0,5 kg cada 7 a 10 días. Los alimentos ricos en calcio también deben fomentarse, con una ingesta de 1000 a 1300 mg/d, así como a una ingesta de vitamina D de 600 UI/d.
Las mejoras en la disponibilidad de energía pueden producir cambios metabólicos positivos en el transcurso de días a semanas, mientras que los cambios en el peso corporal pueden tomar de semanas a meses.
Detectar el problema durante la temporada
Para cualquier corredora que se encuentre en riesgo moderado o alto, se recomienda una reevaluación durante la temporada. Las variables relacionadas con el riesgo, particularmente disponibilidad de energía y el estado menstrual, pueden cambiar durante una temporada.
En última instancia, una herramienta de estratificación de riesgo no reemplaza el juicio clínico, y los médicos deben tener en cuenta la situación única de la deportista en la determinación final de la autorización y el regreso al entrenamiento y la competición.
Figura 1
Conclusiones
Consumir la energía necesaria
Las corredoras de resistencia femeninas generalmente se preocupan por su nutrición, pero el bajo consumo de energía que generalmente se encuentra en esta población puede llevar a desequilibrios y deficiencias nutricionales.
Alcanzar el valor mínimo de consumo de energía de 45 kcal/kg de masa libre de grasa/día más la cantidad de energía necesaria para la actividad física y esto, junto con una dieta bien equilibrada, debería mejorar el estado nutricional de muchas corredoras.
Cuidado de las corredoras
Con la continua popularidad de la carrera y el aumento constante de la participación femenina en el deporte, el cuidado de las corredoras continuará siendo un tema importante para estudiar. Se debe promover una salud ósea óptima y disminuir los factores de riesgo de lesión ósea por estrés y otras consecuencias.
Los riesgos relacionados con la tríada de la mujer deportista no deben disuadir el fomento de la participación en un deporte que es, en general, un esfuerzo saludable y agradable para la mayoría de las participantes.
Fuentes Bibliográficas
- American Dietetic Association, Dietitians of Canada, American College of Sports Medicine, et al. American College of Sports Medicine position stand. Nutrition and athletic perfor- mance. Med Sci Sports Exerc 2009;41:709–31; and Rodriguez NR, DiMarco NM, Langley S, et al. Position of the American Dietetic Association, Dietitians of Canada, and the American College of Sports Medicine: nutrition and athletic performance. J Am Diet Assoc 2009;109:509–27.
- Loucks AB. (2007). Low energy availability in the marathon and other endurance sports. Sports Med.
- Edwards JE, Lindeman AK, Mikesky AE, et al. (1993). Energy balance in highly trained female endurance runners. Med Sci Sports Exerc.
- Zanker CL, Swaine IL. (1998). Relation between bone turnover, oestradiol, and energy balance in women distance runners. Br J Sports Med.
- Barrack MT, Van Loan MD, Rauh MJ, et al. (2010). Physiologic and behavioral indicators of energy deficiency in female adolescent runners with elevated bone turnover. Am J Clin Nutr.
- Daniels EJ. (2014). An examination of the relationship between disordered eating status and nutrient intake among NCAA cross-country runners. Northridge (CA): Cali- fornia State University.
- Barrack MT, Fredericson M, Kim BY, et al. (2015). Evidence of energy deficiency and low carbohydrate intake among male and female elite collegiate endurance run- ners. Med Sci Sports Exerc.
- Tomten SE, Hostmark AT. (2006). Energy balance in weight stable athletes with and without menstrual disorders. Scand J Med Sci Sports.
- Myerson M, Gutin B, Warren MP, et al. (1991). Resting metabolic rate and energy bal- ance in amenorrheic and eumenorrheic runners. Med Sci Sports Exerc.
- Mulligan K, Butterfield GE. (1990). Discrepancies between energy intake and expendi- ture in physically active women. Br J Nutr.
- Bennell KL, Malcolm SA, Thomas SA, et al. (1996).Risk factors for stress fractures in track and field athletes. A twelve-month prospective study. Am J Sports Med.
- Nattiv A, Loucks AB, Manore MM, et al. (2007). American College of Sports Medicine position stand. The female athlete triad. Med Sci Sports Exerc.
- Manore MM, Kam LC, Loucks AB, et al. (2007). The female athlete triad: components, nutrition issues, and health consequences. J Sports Sci.
Importancia de la Nutrición - 100%
Pautas Generales - 100%
Bajo consumo de energía - 100%
Triada de la Mujer deportista - 100%
100%