Se está estudiando si la Dieta Cetogénica sería una buena opción para pacientes con daño renal.
Hoy traemos un estudio muy interesante, no de una calidad científica máxima, pero igualmente interesante.
Índice
Medicina y Dieta Cetogénica
En el mundo de la Nutrición y Medicina existe mucho recelo respecto a las dietas cetogénicas por su supuesto efecto deletéreo sobre la función renal.
Esto normalmente se justifica por su mayor contenido relativo en proteína.
Si bien, he comentado muchas veces, una dieta cetogénica no siempre va a tener un contenido elevado en proteína y la mayoría de veces es una dieta alta en grasa, moderada o adecuada en proteína y restringida en carbohidratos.
El Estudio
El estudio en cuestión es este mismo (Bruci et al., 2020) y se trata de un estudio en vida real (esto puede ser bueno o malo depende en qué nos fijemos), observacional y prospectivo, realizado sobre 92 pacientes con Obesidad.
Los pacientes fueron seguidos durante tres meses.
Esta dieta está caracterizada por los siguientes puntos y que condicionará todo el estudio:
- Aporte de calorías entre 500 y 800 kcal/día, es decir, una restricción calórica bien agresiva.
- Aporte de carbohidratos: <20 gramos diarios.
- 1-1.5 gramos de proteína/kg de peso ideal diarios.
- 15-30 gramos de grasa diarios.
- Basada en sustitutivos de comidas que imitan una dieta mediterránea.
Resultados del Estudio
Ahora os cuento los hallazgos más importantes de este trabajo, que no son pocos:
- Las enzimas hepáticas AST y ALT disminuyeron.
- La cantidad de triglicéridos disminuyó considerablemente, lo cual se refleja en menor contenido de triglicéridos intrahepáticos y menor tamaño del hígado.
- No hubo cambios en el balance iónico.
- Hubo una ligera pérdida de agua (Total Body Water) debido a la mayor natriuresis producida por este tipo de dietas.
- El ácido úrico no se elevó a diferencia de observaciones previas.
¿Qué cantidad de peso perdieron los pacientes?
Una pérdida de peso de media del 20% del peso inicial, lo cual es un resultado bastante significativo desde el punto de vista clínico.
Metabolismo Fosfocálcico
Un leve incremento de calcio y fósforo (sin salirse de rango de normalidad) que puede ser atribuido simplemente a la hemoconcentración.
Los niveles de PTH, hormona que regula el metabolismo fosfocálcico, permanecieron sin cambios.
Lo cual nos tranquiliza, pues uno de los efectos adversos de este tipo de intervenciones tan limitadas en calorías es la pérdida de masa ósea que genera una regulación al alza de PTH y una subsiguiente elevación de calcio y fósforo.
Ferritina
Los niveles de ferritina, un reactante de fase aguda, disminuyeron, lo que podría reflejar una menor inflamación sistémica en pacientes que siguieron la VLCKD.
Función Renal
El hallazgo más interesante de este estudio fue que, dentro del grupo con función renal levemente alterada (TFG 60-90 o IRC estadío 2) un gran porcentaje (el 27%) RECUPERARON la función renal, elevando su tasa de filtrado glomerular por encima de 90 ml/min/kg2.
¿Qué tipo de proteína se aconseja?
En enfermedad renal crónica, la fuente de proteína es tan o más importante que la cantidad total de la misma.
En este sentido tenemos que hacer varias distinciones:
- La proteína procedente de carne roja queda desaconsejada por la mayoría de las guías de práctica clínica
- La proteína procedente de carne blanca, pescado y huevo parece tener un efecto neutro y por lo tanto no empeorar la función renal
- La proteína procedente de fuentes vegetales pudiera tener incluso un efecto renoprotector y es el campo donde más se está investigando actualmente en el terreno de la dietética en nefrología.
Conclusiones
No obstante, hubiera sido interesante incluir pacientes al menos en insuficiencia renal crónica grado 3 (TFG 30-60) o al menos 3b (45-60), dado que los estadios II son frecuentemente reversibles con la pérdida de peso o la corrección de factores de riesgo cardiovascular como la hipertensión arterial.
Dicho esto, otras limitaciones del estudio fue que no se analizó beta-hidrobutirato en sangre capilar, método mucho más preciso que las tiras de orina y medición de acetoacetato que utilizaron.
Por último, por la naturaleza del estudio (estudio en vida real) se trata de un trabajo no controlado, lo cual también limita los resultados.
Si algo nos llevamos de este trabajo es la corroboración de que:
- Se puede conseguir una pérdida de peso muy potente (un 20% es muchísimo peso perdido) en un tiempo relativamente corto (tres meses); y
- Además, no sólo no empeorar la función renal, sino en muchos casos mejorarla, algo que no se había descrito previamente en la literatura, hasta donde sabemos.
¡Espero que os haya sido de utilidad!
Nos vemos en el próximo post. Un fuerte abrazo y a seguir empoderando.
Bibliografía
- Bruci, A., Tuccinardi, D., Tozzi, R., Balena, A., Santucci, S., Frontani, R., Mariani, S., Basciani, S., Spera, G., Gnessi, L., Lubrano, C., & Watanabe, M. (2020). Very low-calorie ketogenic diet: A safe and effective tool for weight loss in patients with obesity and mild kidney failure. Nutrients.
Entradas Relacionadas
- ¿Es posible reducir los Triglicéridos sin Medicamentos? Descúbrelo en este post.
- ¿Cómo comenzar una Dieta Cetogénica? Te lo explicamos todo.
Estudio - 100%
Características de la dieta - 100%
Mejora de marcadores de salud - 100%
Conclusiones del estudio - 100%
100%